En el día de la madre Knorr quería homenajear a las madres, tocando una fibra muy especial de su corazón, que tiene que ver con una conexión real entre madre e hijo, y que además es un insight que traspasa fronteras: el sabor único de la comida de mamá.
Esta pieza se realizó originalmente para las redes sociales, pero su viralización fue tal, que terminó llegando a portales de países de Latinoamérica (Perú, Panamá, Bolivia, México, Honduras) y a medios masivos (TV), incluso en países como Panamá, México y Perú.